Este lunes amanecí con fiebre, dolor de cabeza y garganta. El cuerpo me pedía dormir y reponerme, pero tengo dos proyectos importantes que entregar este mes y además tengo el compromiso de los directos cada lunes a las 11.
Me tomé mis medicinas, procuré no hablar en toda la mañana para tener la garganta despejada, y a las 10:50 ya estaba listo para transmitir. ¿Y adiviná? No llegó nadie. Nadie en YouTube, nadie en Twitch, nadie en Odyssey y nadie en LinkedIn. Si alguien se pasó no comentó nada, entonces fue como estar completamente solo en todo el directo.
Mi objetivo al crear contenido es compartir mi experiencia y fortalecer mi marca personal. No te imaginás lo bien que se mira el canal lleno de contenido y lo bien que le hace a mi sistema de captación de potenciales clientes. Yo lo tengo claro, lo voy a seguir haciendo. Llegue o no llegue nadie.
Por supuesto si llega gente todo es más bonito porque hay interacción, pero si no llegan yo lo voy a seguir haciendo aunque sea duro transmitir completamente solo.