Hola, ¿qué tal? ¿Cómo estás? Espero que todo vaya muy bien. Te saluda Alex Ávalos y te doy la
bienvenida a Panel de Control, el podcast para quienes quieren tener el control de
su propio servidor y disfrutar de las ventajas del hosting VPS. ¿Qué es un VPS? ¿Qué significa VPS?
De eso vamos a hablar en este episodio. VPS significa Virtual Private Server o en español
Servidor Privado Virtual. Si vamos palabra por palabra, virtual significa que no es un servidor
físico que vos podés tocar, que vos podés manipular, sino que es un servidor, es una
herramienta creada por medio de software. Private quiere decir que es tuyo. Nadie más tendrá acceso
a tu VPS. Nadie más va a trabajar en tu VPS y nadie más va a compartir los recursos de tu VPS.
Y server, como estarás sospechando, quiere decir que es una computadora que trabaja 24/7
para lo que vos necesites. En nuestro caso, que nosotros utilizamos los VPS para hosting,
quiere decir que vamos a servir, alojar sitios webs. En pocas palabras, un VPS es tu propio
servidor, pero virtual. Además del VPS, te sonará, por supuesto, el hosting compartido,
pero también es bueno que sepas que se puede contratar un servidor dedicado o un cloud.
¿Cuál debo de usar? ¿Cuál es el mejor? ¿Qué significa cada uno? ¿Cuál es la diferencia
entre uno y otro? Para entender esto, podríamos utilizar diferentes analogías, pero es muy
recomendable usar la clásica analogía del edificio de apartamentos, comparándolo con una casa.
Fíjate que para este episodio, yo le di una vuelta de tuerca. Quería buscar diferentes formas.
Comencé a pensar poder usar la analogía de una cocina, un restaurante, de un gimnasio,
de un parking, incluso hasta le di una vuelta de tuerca a Harry Potter. Pero la analogía clásica
me parece que es la mejor forma de visualizarlo y entenderlo, porque lo sentimos en nuestras
propias carnes. Así que vamos a entender la diferencia entre el hosting compartido, el VPS,
el servidor dedicado y el cloud con una analogía. Le vamos a llamar a esta analogía la ciudad del
futuro.
Con el hosting compartido, vos vivís en esta ciudad del futuro en un hostal.
Compartís habitación con desconocidos. Cada día hay gente diferente, nueva. Algunos te
pueden parecer más agradables o menos. Algunos te pueden incluso hasta dar un poco de temor.
Pero compartís habitación con desconocidos. Si alguien llegó antes que vos, pues,
lamento mucho informarte que en la cama ya no hay sitio y te tocaría dormir en el suelo. Por
supuesto, sin almohadas ni nada con que taparte. Si alguien hace ruido, ni modo, te aguantas. Si
alguien ronca, te aguantas. Y si alguien llevó visitas a dormir, pues, lo vas a tener ahí toda
la noche, lere que lere, platicando. Y ¿sabes qué? Así es. Te aguantas. Al final de la noche,
en la madrugada, si no puedes dormir, te aguantas. Y no hablemos de los recursos en esa habitación.
El baño, la cocina, la mesa, el salón de estar, todo se comparte. Si querés ir al baño,
tenés que esperar. Y si ya te toca tu turno y te descuidas, en lo que vos estás sentado en el baño,
puede entrar alguien y querer o incluso usarlo pasando sobre vos, o a tu lado, o detrás de vos.
En la cocina, se comparte hasta la cuchara. Y si te levantas un poquito tarde, por supuesto,
tu desayuno va a ser pan y agua, porque todos tus roomies y desconocidos en tu habitación,
ya se lo comieron todo. El hosting compartido es barato, muy, muy barato, pero se comparte todo.
Y por supuesto, no tenés ni privacidad, ni control de nada.
Con el VPS, vos tenés tu propio apartamento.
Es tuyo y nadie más entra. Vos, únicamente vos, y nadie más que vos, tiene las llaves. Y vos,
únicamente vos, vas a poder entrar. Dentro de tu apartamento, tu cuarto es solo tuyo. Dentro,
tenés tu propio escritorio para estudiar y trabajar, tu propia TV, tu propio salón de estar,
porque todo el apartamento es tuyo. Podés decorarlo como querrás. Incluso,
tenés tu propia cocina y baño, que por supuesto, solamente vos vas a usar. Nadie te va a agarrar
en tu VPS, en tu apartamento. Nadie te va a agarrar con los pantalones abajo. ¿Por qué?
Porque vos, al entrar, te cercioraste de cerrar con doble llave la puerta. Eso sí, es tu apartamento,
sí, pero estás dentro de un edificio. Y en este edificio, se comparten algunas cosas. Cosas como
la terraza, la bodega, el parking. Pero tu apartamento, tu espacio, es exclusivamente
tuyo. Con el VPS, pasa igual. En el servidor dedicado, en el data center, se comparten
recursos. Se comparte la energía eléctrica, se comparte la red, se comparten los backups,
se comparte la refrigeración, pero el servidor VPS es única y exclusivamente tuyo.
Cuando hablamos del servidor dedicado, imagínate que es como tener una casa
completa. Todo el terreno es tuyo. Vos compraste toda una manzana de terreno y ahí hiciste tu casa
a tu gusto. Con los espacios a tu gusto. Podés arreglar todo lo que querrás, como querrás.
En tu servidor dedicado, en tu casa completa, por supuesto, todo es tuyo. La terraza es tuya,
la bodega es tuya, el parking es tuyo. Claro, es mucho más caro y puede que tengas más espacio
del que necesites, pero con el servidor dedicado pasa esto. Tienes mucho de todo en un inicio,
porque tienes que comenzar a organizarlo. Poco a poco vas alquilando o vas distribuyendo partes
de tu casa para familiares, amigos, trabajo, oficina, proyectos. Normalmente los servidores
dedicados se utilizan para crearte tu propio sistema de virtualización y en el servidor
dedicado crearte diferentes VPS para diferentes propósitos. Algunos utilizan los servidores
dedicados para vender hosting compartido, pero venderlo bien. Esto lo vamos a ver en otros
episodios, pero es bueno que sepas, ya que estamos en esta analogía. ¿Cuál nos falta? Sí,
nos falta el cloud. Con el cloud, para que te hagas una idea en tu mente, estamos hablando
de un apartamento, pero inteligente. Con el cloud, ni Harry Potter se atrevió a tanto,
en esta analogía que te tengo preparada. Incluso Morfeo, con el entrenamiento que le dio a Neo,
a Neo, se quedó corto. El cloud no tenés un espacio, ni recursos fijos, ni estrictos. Con
tu apartamento inteligente cloud, vas a tener adaptación automática. Si necesitas más espacio,
se hace más grande. Si necesitas menos espacio, se hace más pequeño y reduce el gasto, el costo,
lo que vas a tener que pagar. Y todo esto sucede automáticamente. Es escalable,
mágicamente escalable. Imagínate, vas a tener una fiesta. Basta con que programes el evento,
y automáticamente el apartamento se va a convertir en una mansión para poder recibir
cómodamente a 200 invitados. La fiesta terminó, y ya quieres pasar el resto del fin de semana en
plan pelimanta, pues entonces esa mega mansión se acomoda al tamaño justo para que estés a gusto,
pero que no tengas que caminar 10 minutos para ir al baño. El cloud es así de genial,
pero por supuesto, el costo de esta magia maravillosa es alto. Espero que con esta
analogía te quede un poco mejor el concepto de VPS y el qué es un VPS. Y creo, imagino,
supongo que te estarás preguntando, ¿y cómo es posible esto? ¿Cómo es posible que un servidor
físico se convierta en varios VPS? ¿Cómo es posible? Bueno, no es magia. Esto se llama
virtualización. Tienes una computadora, no, no, tienes una super computadora que es el servidor
dedicado, el servidor físico, y con un software especial llamado hipervisor, tienes todo lo
necesario para crearte instancias, máquinas virtuales, servidores VPS. Para que te hagas
una idea, ahora que estamos en este episodio hablando de analogías, el hipervisor es como
Alfred. Sí, sí, Alfred, el de Batman. Alfred está siempre trabajando en segundo plano. Se
encarga de que la baticueva funcione perfectamente. Bruce nunca tiene que preocuparse, nunca tiene
que estar pendiente si la computadora principal de la baticueva tiene actualizado el antivirus,
si el VPS tiene suficiente carga en caso de que se vaya la energía eléctrica o si el batimóvil
tiene gasolina. Alfred ya distribuyó los recursos y se asegura que todo funcione correctamente y
todo esté listo en el momento que se necesita. El hipervisor decide cuánta CPU le da a cada VPS,
controla cuánta RAM puede usar cada uno, se asegura que si un VPS falla, no afecte a los
demás y si un nodo deja de funcionar, de forma dinámica distribuye sus máquinas virtuales en
otro nodo. Magia, hombre, casi, casi. Y si es tan genial, fantástico y maravilloso un VPS,
¿por qué no lo usa todo el mundo? ¿Por qué unos si lo usan y otros no? Para esto deberíamos de
responder a la pregunta, ¿para quién idealmente es un VPS? Y yo te tengo cuatro ejemplos, pero claro,
al final del día cada uno tiene sus necesidades particulares y puede ser que tus necesidades no
encajen en estos ejemplos que yo te tengo. Si vos tenés alguna duda o pregunta con relación a este
punto, si el VPS sí sería una buena alternativa para vos, me escribís, te leo y con mucho gusto
te respondo a tu pregunta. Pero bueno, vamos, ¿para quién es un VPS? Un VPS es muy recomendable
para empresas que están en crecimiento. Si tu sitio web ya recibe más de 500, entre 500 y 1000
visitas a lo largo de 24 horas, el VPS es para vos. Y además, si tu empresa necesita mayor estabilidad
y velocidad, por supuesto, el VPS es recomendable. También es recomendable para e-commerce. ¿Por qué?
Porque en el e-commerce la seguridad es crítica y en tu VPS de serie ya tenés varias cosas resueltas.
Pero también, en el caso del e-commerce, no podés permitirte que tu tienda se caiga o que de repente
vaya lenta. Para un e-commerce también es muy recomendable un VPS. También el VPS se recomienda
para desarrolladores y freelance que necesitan instalar un software personalizado o que quieren
el control total sobre la configuración. Suele suceder que algunas empresas de hosting compartido,
cuando vos pedís incluso algo tan sencillo como una versión específica de PHP, te dicen que no
es disponible, que no está permitido para tu plan actual y si querés tal o cual tenés que pasar
al siguiente nivel y bla, bla, bla. Por último, en estos ejemplos, pero como te digo, si querés saber
si para tu caso en particular me escribís y con mucho gusto te resuelvo la duda. El VPS es muy
recomendable para cualquiera que valore el control. ¿Te gusta saber exactamente cómo funciona tu
hosting? VPS. ¿Querés poder optimizar y configurar según tus necesidades particulares de tu proyecto?
VPS. ¿Buscas potencia a un muy buen precio? VPS. Yo sé que a este punto ya estarás, Alex, quiero
VPS. Dame VPS. Pues antes, antes de dar el paso, hay que pensarlo muy bien y vamos a responder a la
duda. ¿Cuándo es buena idea dar el salto entre el hosting compartido al VPS? Bueno, es muy
recomendable pasar al VPS si tu sitio se pone lento sin razón aparente. Ya optimizaste las
imágenes, estás utilizando plugin de caché, estás siguiendo las mejores prácticas, tus imágenes están
en WebP, tienes los plugins justos y necesarios, no tenés servicios externos, pero sigue todo lento
y tu proveedor te dice que el problema es que necesitas más recursos. Pero el aumento de recursos
sólo implica más gasto porque el resultado sigue siendo el mismo. En casos como este, es muy buena
idea pasarse al VPS. También es buena idea dar el salto cuando recibís más tráfico. Por ejemplo,
vas a comenzar con campañas publicitarias o, por ejemplo, tu contenido se ha viralizado y tenés ya
un tráfico brutal en tu sitio web o en tu tienda o en tu e-commerce. Y además también el hosting
compartido puede ser que ya llegó a su plan más top. Entonces, en este caso, es buena idea dar el
salto al VPS. Algo que también juega y posiblemente ni te has enterado, pero muchos dan el salto al
VPS para tener un mejor uptime, es decir, tiempo de actividad. Cuando tu negocio depende que el
sitio esté siempre online o por lo menos tener el 99.9 de tiempo de actividad. Entonces, en este caso,
el VPS es recomendable. Y dar el salto es un claro que sí. Además, es buena idea dar el salto si
querés instalar aplicaciones específicas. Por ejemplo, necesitas un software que no está disponible
en el hosting compartido o querés configurar tu propio entorno o necesitas versiones específicas
del stack para el proyecto que vas a lanzar. Entonces, en este caso, sí es buena idea dar
el salto. Y por último, y con esto vamos cerrando el episodio, cuando la seguridad es prioridad. Es
buena idea dar el salto al VPS si manejas datos sensibles. Si no querés que otros sitios webs
dentro del hosting compartido puedan afectarte. Y cuando te preocupa la privacidad de tu información.
¿Todas son ventajas con el VPS? Sí, muchas. Pero también con el VPS tenés responsabilidades que las
vamos a ir viendo y vamos a hablar de ellas en otros episodios. De momento, llegamos al final
de este episodio y te recuerdo que cada uno de estos episodios es una pieza del rompecabezas.
Y cuando encajas todas las piezas es cuando logras tener el control total de tu propio hosting en tu
propio servidor. Si tenés alguna duda o querés compartirme tu experiencia o tenés la duda,
la pregunta si es el momento de dar el salto al VPS, bien sabes, no te voy a dar mi IP,
pero sí la URL. Paneldecontrol.org/contacto. ¿Te parece si nos conectamos en el próximo
episodio? Espero que sí. ¡Feliz semana! ¡Salud!
(Música)