Cuando mirás a una persona, ves su cara, su cuerpo, cómo se mueve. Pero no ves su corazón latiendo, sus pulmones trabajando, la sangre circulando. Todo eso está pasando. Todo el tiempo. Pero si falla algo, te das cuenta inmediatamente.
Con las webs es exactamente igual. Cuando entrás en una web, ves la interfaz, los colores, los botones. Pero no ves el DNS traduciendo el dominio a una IP, el SSL encriptando la conexión, el servidor procesando tu petición, la base de datos buscando información. Todo eso pasa en milisegundos, sin que lo notés. Pero si falla, la web no funciona.
En este episodio hacemos una anatomía web completa. Ponemos los rayos X y vemos qué hay bajo una web profesional: la macro anatomía (el frontend que ves), la micro anatomía (el backend y la base de datos que no ves), y los sistemas vitales que conectan todo y mantienen tu web viva, accesible y segura.
Porque para tener una web profesional, no podés descuidar una parte y esperar que todo funcione correctamente. Es como el cuerpo humano: todos los sistemas trabajan juntos.